sábado, 17 de octubre de 2015

EDUCACIÓN PUBLICA EN SANTA MARÍA PETAPA, OAX. MEXICO

  EDUCACION PÚBLICA EN SANTA MARIA PETAPA, OAX.

En la segunda década del Siglo XX,  como resultado de las transformaciones operadas por el movimiento revolucionario iniciado en 1910, se inició una intensa movilización a lo largo y ancho de  la República Mexicana en  favor de la educación pública, destacándose  la atención prestada a las escuelas primarias en el medio rural.

El 13 de febrero de 1919  (*) se instaló en Santa María Petapa, Oax.,  la  primera escuela pública de la comunidad, en un local del antiguo edificio del palacio municipal que actualmente, ya remodelado,  ocupa la casa parroquial .El plantel recibió  el nombre de Escuela Primaria Rural “Vicente Guerrero”, y estuvo atendida por un solo maestro desde su fundación hasta finales de los años cuarenta, en que se impartieron los cursos del primero al cuarto grado Desde entonces perteneció a la circunscripción de la Inspección Escolar Federal con sede en Matías Romero, Oax. Entre los primeros maestros que tuvieron a su cargo la Escuela mientras fue de un solo maestro  y permanecieron varios años en la comunidad,  se recuerda a Hilarión Cruz,  Hermilo Ordaz, Félix Aragón  y Leopoldo Castillo Meneses.

Anteriormente no existió ningún tipo de escuela  en el pueblo. El señor  Francisco Vásquez, que tenía su casa  donde termina actualmente  hacia el oriente la calle  Independencia,  impartía clases elementales de escritura y lectura a contados niños y niñas. Eran muy pocas  las  familias que estaban  en condiciones de dar a sus hijos una educación rudimentaria. 

La primera  escuela funcionó en el local antiguo que le prestó el Ayuntamiento  hasta 1938, año  en que se construyó el actual palacio municipal. Era una tejabana de dos aguas, de paredes de adobe y piso de ladrillo rojo cuadrado; una mitad longitudinal, la del lado poniente, prácticamente una galera,  servía de salón múltiple en donde se distribuían los grupos del primero al cuarto año. La otra mitad que queda hacia el oriente servía de corredor con  gruesas columnas de ladrillo. El edificio ha de haber sido construido en el siglo XIX cuando el pueblo fue elevado a la categoría de municipio libre. Todavía en 1945 cuando las autoridades del municipio ya tenían años de haberse  cambiado  a su nuevo edificio, una de las cárceles de reja de madera cuadriculada, seguía instalada, aunque en desuso, en el extremo sur del edificio escolar. Un año después fue demolida y convertida en salón de clases.

Los mesabancos de madera  eran enormes, cabían en ellos cómodamente seis  o más alumnos,  estaban pintados de color gris, y fueron construidos, lo mismo que los pizarrones,  por  carpinteros de la localidad, entre los que destacó el señor Toribio Gallegos. El grupo de 4° año trabajaba en dos mesas rectangulares. Los mesabancos para dos alumnos fueron adquiridos a finales de los años cincuenta.

A raíz del conflicto civil-religioso  que se produjo en la República durante  los años 1926-1928  y que trajo como consecuencia la salida del párroco y la suspensión temporal del culto,  el curato de la iglesia local se convirtió en salones de clase. En ese periodo un comité de ciudadanos católicos tuvo a su cargo las instalaciones parroquiales. Después de 1938, cuando las oficinas municipales se trasladaron al nuevo palacio, la escuela se concentró en su antiguo local.

El  maestro Castillo Meneses, juchiteco,  graduado en la Escuela Normal Rural de Comitancillo, Oax.,  llegó a Petapa hacia 1946. Anteriormente había prestado sus servicios en la comunidad de La Maceta del municipio de Santo Domingo Petapa.  Desde el inicio de su gestión se notó un cambio positivo en la labor de la escuela dentro de la comunidad. Se trabajaba entonces el horario discontinuo; maña y tarde. Estableció la escuela nocturna para adultos; los alumnos estudiaban  a la luz de candiles de petróleo improvisados con botellas, porque no había luz eléctrica. Impulsó el deporte de básquetbol. Estableció la hortaliza escolar en el terreno, reserva territorial del Municipio, ubicado detrás del actual palacio municipal y rehabilitó parcialmente el jardín municipal. Los actos cívicos como el homenaje a la bandera los lunes de cada semana, los desfiles del 16 de septiembre y 20 de noviembre cobraron nuevo impulso, así como las pequeñas obras de teatro con temas de la Independencia y la Revolución, en las que participaban no solamente los niños de la primaria sino también los adultos de la escuela nocturna; las llamaban “comedias”. Los cantos escolares eran apoyados por músicos de la localidad. Se elaboraba el periódico mural con regularidad. Gestionó la construcción de la Casa del Maestro, una modesta tejabana que estuvo ubicada en donde  está  actualmente el Jardín de Niños “Emiliano Zapata”.

Entre los alumnos de la primera generación de cuarto grado que formó el profesor Castillo Meneses se recuerdan los siguientes: Albino Tomínez, Concepción Mendoza, Tecla Santiago, Héctor Flores Villanueva, Efraín Mendoza Carvajal,  Esteban Martínez, Fernando Ordaz, Aurelio Altamirano Hernández, Pedro Tonel, Honorio Vásquez Martínez, Alejandro Nájera, Carlos Heredia, Simón Dehesa, Esteban Mendoza.(*)

En 1947, un alumno de esta primera generación, Aurelio Altamirano Hernández, obtuvo una beca para estudiar en la Escuela Normal Rural de Comitancillo,Oax.,y en 1953 obtuvo el Primer premio en el Concurso de la Canción Tehuantepecana,  efectuado  con motivo de la celebración del Primer Centenario de la Sandunga. Estos hechos fueron reconocidos como éxitos plausibles de la  nueva generación.

Una feliz coincidencia hizo que la escuela del pueblo tuviera su gran oportunidad de progresar.  Era director de la misma el maestro Castillo Meneses y funcionario de la Secretaría de Educación Pública el maestro Gustavo C. Hermesdorf, nativo de Santa María Petapa. En una de sus visitas al pueblo, adonde acudía para visitar a su señor padre, Don Erasmo C. Hermesdorf,  el maestro Gustavo  tuvo conocimiento de la  brillante actuación del Director, quien era a la vez el único docente y se daba abasto para atender las labores administrativos y docentes; y aun así  todavía le quedaba tiempo para realizar  las tareas comunitarias. Los dos hombres simpatizaron, pues ambos fueron siempre entusiastas, de ideas avanzadas, incansables trabajadores de la educación. De su encuentro surgió la idea de construir un nuevo edificio escolar.

El apoyo empezó a fluir, tanto del nivel federal (SEP) como del estatal a través de la Dirección Federal de Educación y de la Inspección Escolar de Zona. Se aumentó la plantilla docente y el maestro  Castillo Meneses quedó como director efectivo, con más disponibilidad de tiempo para atender sus múltiples tareas educativas. A principios de la década de los  ‘50 la Escuela  Primaria Federal “Vicente Guerrero” era considerada como de organización completa, con una plantilla suficiente para atender los grados del primero al sexto. Acudían  alumnos de las poblaciones vecinas de El Barrio y Santo Domingo Petapa a terminar sus estudios de Primaria superior en este plantel. Formaron  parte del  primer cuerpo docente, entre otros,  los profesores Juventino Martínez, Mario Takahashi, y la maestra Nory Estudillo Rosas,(*). La biblioteca escolar adquirió centenares de volúmenes selectos, cuyo catálogo parcial puede verse en el opúsculo intitulado “Breve Lista de Obras Recomendables”, publicado  por el maestro Gustavo C. Hermesdorf.

Fue muy importante la participación de los sucesivos  Comités de Educación que se organizaron  para  fortalecer la acción de la Escuela en la comunidad. Se distinguieron  en esta labor: Cipriano Martínez, Aurelio Brabilla, Salomón Ramírez, Francisca Vásquez, Adolfo Poblete, Luis Martínez, Pedro Orozco y Aristeo P, Flores, entre otros ciudadanos.

Se organizó también la Sociedad “Amigos de la Escuela”, que presidió don Erasmo C. Hermesdorf. Colaboraron activamente en esta organización además de los miembros del Comité de Educación las siguientes personas: Manuel Cruz,  Cipriano Vásquez, Roberto Celaya,  Martín Liceaga,  Alejandra Rivera, Lauro Mendoza,  Fernando Altamirano y varios ciudadanos más. Los ejecutantes de la Marimba “Yoloxóxhitl”, Leopoldo Brabilla, Alfredo Mendoza, Anatolio Hernández y Adalberto Mendoza, apoyaron con la ejecución de bailables  a los grupos escolares que participaron en los concursos regionales.  

Hacia 1950, dos alumnos más de la primera generación de cuarto grado del maestro Castillo, Efraín Mendoza Carvajal y Cenorino López Martínez, se habían trasladado a la capital de la república, donde continuaron sus estudios y en 1954 empezaron a laborar como maestros de educación primaria.  

En  marzo de 1954, Aurelio Altamirano Hernández se incorporó al equipo del maestro Gustavo C. Hermesdorf, en las oficinas centrales de la SEP, en donde colaboró muy cercano al maestro hasta  diciembre de 1956. Por esa misma fecha, cuatro  destacadas alumnas: Zoyla Poblete,  Rufina Brabilla Canseco, Lorenza y Etha Vásquez Mendoza estaban laborando ya como maestras de educación primaria, y otros ex - alumnos distinguidos, Andrés Martínez, Tizoc Vásquez, Fernando Ordaz, Feliciano Jiménez  y Juan Cruz,  se sumaron  a las filas de los trabajadores de la educación. Los integrantes de esa nueva generación se integraron en la Sociedad  de Estudiantes Petapenses,  que inauguró sus actividades  en  diciembre de 1956 

En 1955 la Escuela fue abanderada por las autoridades civiles, militares  y educativas en una brillante ceremonia que congregó a numerosos personas  del pueblo y de las localidades vecinas. Portó la bandera nacional la Señorita Silvia Vásquez Rivera.

El proyecto de la construcción del nuevo edificio escolar fue elaborado por el  ingeniero (*) comisionado por la Secretaría de Educación Pública. La primera piedra  fue colocada en 1951. Estuvieron presentes en el acto protocolario  las siguientes personas: Sr. Cipriano Vásquez , Presidente municipal (*); don Erasmo C. Hermesdorf, Presidente de la Sociedad “Amigos de la Escuela”;el Ingeniero comisionado por la SEP;  el Inspector Escolar de la Zona, Prof.. Rosalino Fuentes (*) Saynez ; y los señores Adolfo Poblete, Luis Martínez y Jesús Caba. El profesor Gustavo C. Hermesdorf  tomó las fotografías históricas del acto. Inició los trabajos un maestro albañil de El Barrio,(*).

Poco tiempo después, el profesor Castillo Meneses se trasladó a Santo Domingo Petapa, lugar de residencia de su familia y siguió conservando el afecto y reconocimiento del pueblo de Santa María Petapa, que años más tarde le tributó un  emotivo homenaje.

En 1951 se hizo cargo de la Dirección de la Escuela, el profesor Enrique Vásquez Cruz  El Ayuntamiento que estuvo hasta 1953 bajo Administración Civil, con Cipriano Terán, Presidente; Fernando Altamirano,  Secretario, y Víctor Vásquez, Tesorero; continuó los trabajos  y al término de  la construcción de los primeros salones de clase, todos los servicios se trasladaron a su nueva sede. Años  después,  siendo presidente municipal Alfredo Mendoza Vásquez, el Ayuntamiento entregó en comodato el  terreno y  el viejo edificio escolar, propiedades  comunales,  a  un  Patronato  dirigido por frailes  dominicos que se encargaron de remodelarlo y habilitarlo como casa parroquial. Durante breve tiempo estuvo instalada allí la Casa de la Cultura.

La Escuela Primaria de este lugar ha sido semillero de profesionales y dirigentes sociales que han alcanzado notables posiciones  en la vida pública.  A la lista de ex – alumnos que hemos mencionado  agregaremos los nombres siguientes de una nueva generación:

Luis Brabilla Ramírez, Profesor Normalista que se desempeñó como docente e  Inspector Escolar de Zona; actualmente jubilado.

 José Altamirano Hernández, Profesor Normalista, Psicólogo y Licenciado en Pedagogía, que se desempeña como Inspector Escolar de Zona, con 50 años de servicio;

Ángel Vásquez Santiago. Líder campesino. Dedicó sus esfuerzos a la defensa del patrimonio territorial del Municipio, afrontando peligros como ocurrió en los momentos  críticos de la invasión de los terrenos de Guivicía, en los años cincuenta. Fue Presidente Municipal, durante su gestión se dio prioridad al problema del agua potable y la organización del Comisariado de Bienes Comunales.

Cipriano Vásquez Carrasco. Líder  Campesino. Asumió la Presidencia Municipal,  contribuyendo a mantener  la estabilidad política en el Municipio y  la defensa del patrimonio territorial en los conflictos con los Municipios vecinos.

Eduardo Vásquez. Líder campesino. Fue Presidente Municipal y se ha distinguido por su participación en la organización del Comisariado de Bienes Comunales y la defensa del territorio municipal.

Germán Juárez Mendoza, Contador Público, dos veces Presidente Municipal y actual Diputado en la Legislatura del Estado, iniciador  de los trabajos de   pavimentación de las calles, drenaje, alcantarillado y agua potable, y un decidido impulsor de la educación popular; decidido defensor de los bienes comunales del pueblo.  

Julián Cruz Altamirano, Contador Público. Se ha desempeñado como Jefe de Servicios del Instituto Mexicano del Seguro Social en las Delegaciones Regionales del IMSS en los Estados de Veracruz  y  Jalisco. Actualmente es funcionario de la Delegación Regional del IMSS en Veracruz – Norte.

David Martínez Carrasco, Ingeniero, actual Presidente Municipal, que está dando impulso, entre otras áreas del desarrollo municipal,   a las obras de urbanización y  mejoramiento de la infraestructura  escolar,  a la  electrificación en el área  urbana y suburbana,  e importantes gestiones en materia de procesamiento de aguas residuales y vías de comunicación. Mantiene la honrosa tradición de defensa del patrimonio territorial del Municipio;

Rolando Cruz Altamirano, Ingeniero químico. Radica en Bratislava, capital de la República Eslovaca, que antes formaba parte de Checoslovaquia. Además de sus actividades profesionales en la industria, promueve la música folklórica mexicana (mariachis) con elementos de aquel país y han participado en el Festival Internacional que se celebra en Guadalajara, Jal.

Los hermanos Lauro y Belisario Mendoza Sosa, que han tenido un alto desempeño en su carrera profesional, y constituyen un buen ejemplo  de la proyección social que han alcanzado los alumnos egresados de la Escuela petapense.

Ramón Cruz Altamirano, Doctor en Ciencias, catedrático universitario. Actualmente es Director Regional del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) Zona Centro que abarca siete Estados.

Lilia Cruz Altamirano, Socióloga y Maestra en Ciencias. Actualmente  realiza el  Doctorado en Ciencias. Viaja a diversos partes  de la República y de países  de Sudamérica en trabajos de investigación.

Otros distinguidos ex - alumnos, algunos aun  poco conocidos por ahora, y otros en franco camino de desarrollo,  luchan actualmente por ocupar posiciones relevantes como dignos herederos de la  cultura del esfuerzo que ha distinguido a las generaciones forjadas  en nuestra Escuela Primaria Federal “Vicente Guerrero”.







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